Par Biomagnético

Seguramente ya sabrás que nuestro organismo está compuesto por agua en un 70%. ¿Por qué esto es importante? Porque si el agua de nuestro cuerpo se sale del nivel energético normal (PH Neutro) se favorece el crecimiento descontrolado de bacterias , virus, hongos o parásitos que alteran el equilibrio de nuestro funcionamiento biológico, provocando que enfermemos irremediablemente.

Al igual que el cloro sirve para acabar con las bacterias que crecen en una piscina, los imanes desactivan los virus, bacterias, hongos o parásitos que se encuentran en el agua de nuestro cuerpo cuando estos nos dañan o enferman.

Origen

En 1988, un médico alopático, de nombre Isaac Goíz Durán, tratando de ayudar a un paciente terminal de SIDA descubrió que impactando dos imanes (positivo y negativo) en dos puntos del cuerpo relacionados entre sí se producía un equilibrio en el organismo del paciente que permitió que recuperase la salud en una sola semana. Es lo mismo que sucede cuando a una piscina contaminada le añades cloro: vuelve a estar limpia y clara en un breve espacio de tiempo.

Isaac Goíz determinó qué puntos específicos del organismo hay que impactar con los imanes para que virus, bacterias, hongos y parásitos patógenos no encuentren el medio (acidez o alcalinidad) que necesitan para prosperar y desarrollarse descontroladamente.

Cómo se aplica

Si un microorganismo está desequilibrando algún órgano del paciente se detectará –en consulta– por el acortamiento o alargamiento de la extremidad inferior derecha, y se podrán colocar imanes positivo y negativo según las necesidades.

Los imanes se impactan durante 15 o 20 minutos, con el paciente tumbado en la camilla, completamente vestido, incluido el calzado.

Cada sesión dura aproximadamente 60 minutos, dependiendo del padecimiento de la persona.

Beneficios

  • Mayor oxigenación de todos los órganos y tejidos debido al aumento  del flujo sanguíneo.
  • Efecto antienvejecimiento por la mayor asimilación de sales.
  • Disminuye el cansancio y el estrés.
  • Se debilitan e inactivan los virus, bacterias, hongos y parásitos patógenos al desconfigurar sus campos magnéticos.
  • Relajación generalizada al disminuir la fatiga celular.

El biomagnetismo puede ser el medio para recuperar el equilibrio y sanarte definitivamente.

  • Si tienes síntomas persistentes que no se resuelven con medicamentos.
  • Si tu enfermedad se ha cronificado.
  • Si tienes algún desequilibrio emocional.
  • Si tienes un desgaste energético que no te permite disfrutar de una vida plena.

Ventajas

  • Es un tratamiento no invasivo, indoloro y sin efectos secundarios.
  • En muy pocas sesiones –entre una y tres– se alcanza una mayor calidad de vida.
  • Se puede combinar con la medicina alopática.
  • Reduce la cantidad de medicamentos a consumir.

El par biomagnético es un tratamiento eficaz en la mayoría de pacientes con:

  • Dolores de cabeza frecuentes
  • Tos persistente
  • Acúfenos o ruidos en los oídos
  • Intolerancias alimenticias
  • Alergias
  • Vértigo o Síndrome de Menier
  • Ciática
  • Dolores de espalda o articulaciones
  • Colon irritable
  • Infecciones recurrentes: herpes, anginas, laringitis, cistitis
  • Problemas intestinales
  • Síndrome de fatiga crónica
  • Fibromialgia
  • Arritmias
  • Hipertensión
  • Esclerosis múltiple
  • Crisis de ansiedad
  • Depresión
  • Decaimiento
  • Problemas hormonales: hiperhidrosis, diabetes, disfunciones sexuales
  • Cansancio crónico
  • Estrés
  • Insomnio
  • Terrores nocturnos
  • Desequilibrios emocionales: Trastorno alimenticio, Doomscrolling